Albert Einstein

Hay una fuerza motriz más poderosa que el vapor, la electricidad y la energía atómica: la voluntad…

Blog José Manuel López Nicolás

“TRATO HECHO”

Cierto Profesor de Bioquímica y Biología Molecular, ¡sólo Dios sabe que explicará este buen hombre en sus clases!, conocedor de mi fama de cuentista, para que nos entendamos persona que se dedica a escribir relatos, me ha propuesto un reto.

Él, que sabe de mi urticaria por todo aquello que huele a Ciencias, me pide que con cierta periodicidad (¡uff! Eso me suena a decimales, a elementos químicos y demás) tenga a bien hacer una narración para un Blog, el cual dicho sea de paso, y sin ánimo de ofender a la comunidad científica, huele a conocimiento que tira para atrás.

A priori, escribir un cuento, dada mi profesión, no debería revestir complicación alguna pero… las cosas nunca son tan fáciles como una se imagina.

Dicho docente se precia por ser “pelín” exigente para con sus alumnos, es más tiene la fea costumbre de impostar voz grave a la hora de pedir a sus pupilos la realización de un trabajo; y eso fue lo que hizo conmigo al tratarme como a uno de sus discípulos del siguiente modo:

“Señorita Galiana, ya que pierde su tiempo escribiendo sobre temáticas tan absurdas como las relaciones entre humanos, le propongo que se deje de emborronar folios y escriba sobre algo con más fundamento. Le sugiero (cuando un profesor te hace una sugerencia es casi como decir hazlo como yo te digo o atente a las consecuencias) que escriba sobre ciencia, pero CIENCIA, escrito con mayúsculas, porque así es como yo la entiendo”.

Ni que decir tiene que se me quedó cara de póker, en primer lugar porque alumna suya no soy, ni creo que lo sea jamás, segundo porque para mí las Matemáticas son un conjunto de morfemas en los cuales la “m” con la “a” se lee “ma” y así sílaba a sílaba, hasta completar la palabra.

Cierto es que podía haberme negado; pero fue entonces cuando recordé mis pésimas calificaciones en Ciencias Naturales y demás asignaturas afines, y de cómo en su momento opte por las “Letras” harta de ver “rojos” en mi boletín de notas; así pues me lo tomo como la oportunidad de resarcirme de todo aquello.

El Profesor de Bioquímica y no sé cuantas cosas más (al menos eso pone en la placa de la puerta de su despacho), tendrá su cuento, a cambio necesito que me ayude a comprender por qué la Bioquímica se compone de carbono, hidrógeno, oxigeno, azufre, nitrógeno y fósforo cuando realmente es mucho más fácil de definir; Bio en griego significa vida, Química es el arte de mezclar ilusiones en una probeta, agitarlos y…vualá.

El relato tiene que ser sobre la CIENCIA, que sea la misma Scientia quien nos deleite con su biografía.

“Nací fruto de la relación entre la causa y el efecto, pero fui engendrada de la lógica matemática y el facticismo empírico. Genéticamente tengo tanto de incertidumbre como de constancia no en vano me desarrollan con modelos, hipótesis, leyes y teorías.

Datar mi fecha de nacimiento no es tarea sencilla pues en mi infancia la astronomía y la astrología eran casi lo mismo, y apenas existía diferencia entre la química y la alquimia.

En mis orígenes viaje por tierras de Babilonia, por China, por Egipto, e incluso me empapé de la cultura precolombina, aunque debo admitir que los griegos me hicieron crecer en geometría, álgebra y astronomía.

Tras los romanos tiempos convulsos me llevaron al ostracismo, al oscurantismo, al casi olvido, pero no perdí la esperanza y el renacimiento italiano me rescató de todo aquello elevándome muy alto, llevándome a Inglaterra a Francia, y desde entonces no he parado de evolucionar.

Mi vida es un cúmulo de percepción, intuición y lógica. En mi trato con la especie humana me dotan de ciertas dosis de locura, la justa para transformar en real los imposibles.

Ni que decir tiene que mi mayor pecado es el conocimiento, por algo me bautizaron como SCIENTIA”

Galiana

© Copyright - Colegio Montepinar